Por Ricardo Palomares (DT)
PLANTEL PLAY OFF
Bueno acá estamos otra vez, faltan horas para las batallas más importantes de nuestras vidas, todo se reduce a dos fines de semana, o sanamos como equipo o nos desmoronamos.
Paso a paso, jugada a jugada, hasta que acaben con nosotros. Ahora estamos en el infierno, créanme, y podemos quedarnos aquí, dejar que nos partan la cara o podemos pelear hasta volver a ver la luz, podemos escalar las paredes del infierno hasta salir... De un paso a la vez.
Ahora, yo no puedo trepar en su lugar, estoy demasiado viejo, miro a mí alrededor, veo sus caras jóvenes y pienso, que tomé solamente de decisiones malas en mi madurez, desperdicié todo mi dinero, aunque no lo crean, ahuyente a todos los que me han amado y últimamente, ni siquiera tolero ver mi cara en el espejo.
¿Saben? Cuando uno envejece en la vida, te quitan cosas, digo, pero es parte de la vida, pero solo lo aprendes cuando empiezas a perder las cosas y descubres que la vida es un juego de pasos. Lo mismo en el Hockey, porque cualquiera de los dos juegos, la vida o el hockey, el margen de error es tan pequeño que medio paso demasiado tarde o demasiado pronto y pierdes, medio segundo antes o después de tiempo y no lo alcanzas.
Ese paso que necesitamos esta a todo nuestro alrededor, están en toda oportunidad, a cada minuto, a cada segundo. En este equipo peleamos siempre por dar ese paso... y hacemos pedazos a todos a nuestro alrededor por ese paso ¡escalamos con las uñas las paredes de este infierno por dar el gran paso... porque sabemos que la suma de todos esos pasos será la diferencia entre la victoria y la derrota!
¡Entre la vida y la muerte!
Escuchen, en cualquier pelea el hombre que esta dispuesto a morir es el que ganará el gran paso. Sé que si puedo seguir con mi vida es porque estoy dispuesto a luchar y a morir por Ascenso ¡Porque eso es lo que es vivir! ¡Los dos pasos enfrente de nuestras caras!
¡Yo no puedo obligarlas a que lo hagan!
¡Tienen que mirar a sus compañeras!
¡Mírenlas a los ojos!
¡Van a ver a alguien que dará todo por ese ascenso, por ustedes!
¡Verán a compañeras que se sacrificarán por este equipo... porque saben que cuando se inviertan los papeles ustedes harán lo mismo por ellas!
¡Eso es un equipo, muchachas!
Y, o sanamos ahora como equipo o morimos como individuos, eso es hockey, no hay mas...
Ahora... ¿qué van a hacer?
Paso a paso, jugada a jugada, hasta que acaben con nosotros. Ahora estamos en el infierno, créanme, y podemos quedarnos aquí, dejar que nos partan la cara o podemos pelear hasta volver a ver la luz, podemos escalar las paredes del infierno hasta salir... De un paso a la vez.
Ahora, yo no puedo trepar en su lugar, estoy demasiado viejo, miro a mí alrededor, veo sus caras jóvenes y pienso, que tomé solamente de decisiones malas en mi madurez, desperdicié todo mi dinero, aunque no lo crean, ahuyente a todos los que me han amado y últimamente, ni siquiera tolero ver mi cara en el espejo.
¿Saben? Cuando uno envejece en la vida, te quitan cosas, digo, pero es parte de la vida, pero solo lo aprendes cuando empiezas a perder las cosas y descubres que la vida es un juego de pasos. Lo mismo en el Hockey, porque cualquiera de los dos juegos, la vida o el hockey, el margen de error es tan pequeño que medio paso demasiado tarde o demasiado pronto y pierdes, medio segundo antes o después de tiempo y no lo alcanzas.
Ese paso que necesitamos esta a todo nuestro alrededor, están en toda oportunidad, a cada minuto, a cada segundo. En este equipo peleamos siempre por dar ese paso... y hacemos pedazos a todos a nuestro alrededor por ese paso ¡escalamos con las uñas las paredes de este infierno por dar el gran paso... porque sabemos que la suma de todos esos pasos será la diferencia entre la victoria y la derrota!
¡Entre la vida y la muerte!
Escuchen, en cualquier pelea el hombre que esta dispuesto a morir es el que ganará el gran paso. Sé que si puedo seguir con mi vida es porque estoy dispuesto a luchar y a morir por Ascenso ¡Porque eso es lo que es vivir! ¡Los dos pasos enfrente de nuestras caras!
¡Yo no puedo obligarlas a que lo hagan!
¡Tienen que mirar a sus compañeras!
¡Mírenlas a los ojos!
¡Van a ver a alguien que dará todo por ese ascenso, por ustedes!
¡Verán a compañeras que se sacrificarán por este equipo... porque saben que cuando se inviertan los papeles ustedes harán lo mismo por ellas!
¡Eso es un equipo, muchachas!
Y, o sanamos ahora como equipo o morimos como individuos, eso es hockey, no hay mas...
Ahora... ¿qué van a hacer?
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